Artículo publicado en el número 19 (Junio 1985) de Logo Micros
Secoinsa Fujitsu FM7

Secoinsa FM-7

Una herramienta personal

El FM-7 es un nuevo micro que ha sido presentado recientemente en el mercado español. Viene de la mano de Secoinsa y trae ambiciones educativas y profesionales. MICROS ha tenido la oportunidad de analizarlo en profundidad, por primera vez en España. Estos son los resultados

Hasta que el Secoinsa FM-7 fue presentado definitivamente en el salón de material de oficina Informat, a mediados del pasado mes de abril, circularon por el mundillo de la informática personal todo tipo de rumores sobre el futuro de esta máquina. Se decía, por ejemplo, que el FM-7 era el más firme candidato para automatizar la enseñanza española. Aunque tampoco faltaron opiniones que auguraban un oscuro destino a este micro, abocado a convertirse en uno más entre la jungla microinformática que ha invadido nuestro país en los últimos años.

En el momento de cerrar esta edición de MICROS, el Ministerio de Educación no había tomado ninguna decisión con respecto al polémico Proyecto Atenea, pero todos los indicios parecían apuntar hacia la definitiva homologación del FM-7 como el microordenador oficial de la enseñanza española. Las autoridades educativas socialistas seguirían así los pasos de sus colegas británicos que, ya en la década pasada, adoptaron como modelo la máquina construida por la firma Acorn, que a partir de aquel momento fue conocida bajo las siglas «BBC».

El Secoinsa FM-7, como es sabido, ha sido desarrollado por la firma japonesa Fujitsu (Fujitsu Micro 7), lo que no significa que esta máquina se presente en España envuelta en la tradicional política comercial, enfocada hacia la venta masiva, a que nos tienen acostumbrados ciertos fabricantes de aquel país de extremo oriente. Por el contrario, se trata de un equipo con una filosofía distinta. Se pretende, en primer lugar, que el porcentaje de fabricación nacional en el FM-7 alcance una cifra cercana al 65 por 100 para después del verano y, a partir de noviembre de este año, se acerque al 90 por 100.

Por otra parte, Secoinsa – importador y futuro fabricante del FM-7 – ha planteado su estrategia comercial hacia la venta de una herramienta de trabajo, y no un producto de consumo condenado en pocos años a la obsolescencia. El FM-7 puede adaptarse sin problemas a determinadas necesidades de la pequeña y mediana empresa, al tiempo que colabora con el profesional independiente, en su casa o en la oficina. Todo ello sin olvidar las enormes posibilidades didácticas que las aplicaciones para esta máquina han demostrado, antes y después de su presentación en España, y de las que se hablará más adelante.

La vista encima

Al abrir la caja donde ha sido cuidadosamente embalado el FM-7, la primera ojeada revela un equipo de aspecto agradable, con una promesa de comodidad en el ocio o el trabajo para el usuario. La máquina que pudo conseguir MICROS para realizar este test tenía el teclado en versión alemana, ya que por razones de tiempo y oportunidad no estaban disponibles los teclados españoles con eñes, vocales acentuadas y cedilla. Si bien en el momento de redactar este artículo, todos los equipos presentados en los salones Informat e Iberdidac disponían de los mencionados caracteres,

El Secoinsa FM-7 incluye de serie el mismo número de teclas que un ordenador profesional de mayor precio, a saber: diez teclas de función programables y un keypad numérico independiente, donde se sitúan los signos matemáticos más comunes, el punto decimal y una tecla de RETURN auxiliar. Además, otros dos bloques, uno para el control de los movimientos del cursor y otro con cuatro teclas de función no programables completan el teclado de esta máquina.

No obstante, lo más conflictivo del FM-7 en este capítulo, desde el punto de vista de MICROS, es la disposición de los conectores, interfaces y slots de expansión del sistema, Algunos de ellos se encuentran situados en la parte superior del aparato, protegidos por una cubierta de plástico, que puede no ser suficiente garantía a la hora de resistir un «tirón», por ejemplo, del cable de conexión con la unidad de disquetes o, más comúnmente, del lápiz óptico o el ratón, periféricos estos que requieren de una dureza y resistencia especiales en sus conexiones,

El botón de RESET y los conectores de salida para el monitor, la impresora y la puerta de expansión del sistema se encuentran, sin embargo, en una posición bastante más cómoda y segura para el usuario en el frente posterior del FM-7, lo que permite un acceso fácil siempre que sea intencionado. Es decir, no es posible «resetear» o desconectar alguna de estas clavijas si el usuario no se lo ha propuesto previamente,

Un detalle interesante del nuevo micro de Secoinsa es su baja temperatura de trabajo, en comparación con otros equipos de precio similar analizados por esta revista. Nuestro «germánico» FM-7 estuvo trabajando durante más de diez horas sin interrupción. Tiempo más que suficiente para «derretir» cualquier electrónica poco fiable a las que tan acostumbrado está el mercado español en los últimos tiempos. Sin embargo, esta máquina no alcanzó la temperatura suficiente como para preocupar a este equipo de redacción, que continuó incansable durante algún tiempo más trasteando las interioridades de este micro,

La pantalla que incorpora el FM-7, en color o fósforo verde, constituye una de sus mejores cualidades. Con una resolución muy interesante de 640 x 200 puntos, esta máquina consigue unos gráficos capaces de satisfacer exigencias de lo más exquisito. Y es que no en vano, uno de los microprocesadores 68B09 que incorpora de serie el FM-7 está dedicado al control de gráficos. Esto amplía las posibilidades de pantalla de esta máquina, que logra una ejecución muy rápida y con una calidad poco comunes entre equipos de precio similar.

La peana móvil permite una orientación precisa del monitor, aunque se echa de menos, eso sí, un botón adicional para el control del contraste de las imágenes, que deberá realizarse con la única ayuda del mando de brillo, Esta sorprendente ausencia en un equipo con una orientación tan acusada hacia el manejo de gráficos no tiene, sin embargo, consecuencias negativas para la calidad de las representaciones que, como queda dicho, son de lo «mejorcito» que ha pasado por las páginas de esta revista,

Por otra parte, las unidades de disquetes, de las que es posible conectar hasta un total de cuatro, tienen capacidad para almacenar 320 Kbytes cada una. El equipo analizado por MICROS adolecía de una lentitud pasmosa a la hora de cargar datos o programas desde la unidad doble de disquetes, Quizá sería interesante que el fabricante revisara el funcionamiento de este periférico con vistas a incrementar su agilidad y rapidez.

Mucho más brillante es el funcionamiento de la impresora, bidireccional y de impacto, que el FM-7 presenta en su configuración base. La dualidad de los modos de arrastre del papel, por tracción y fricción, permite el uso de soportes continuos o folios convencionales. Además, se encuentra dentro de los límites de ruido tolerables, aspecto este que se ha convertido en el «caballo de batalla» de los fabricantes de impresoras de todo el mundo.

El Secoinsa FM-7 utiliza una versión del Basic llamada «F-Basic V3-0» que no es otra cosa que una revisión del dialecto desarrollado por Microsoft para los micros de la serie FM de Fujitsu. Se presenta en dos modalidades: ROM o disco.

Esta última incluye un sistema operativo propio del fabricante que ha sido traducido al español por la propia Secoinsa, aunque en el momento de cerrar esta edición, sólo estaba disponible una copia que exhibía sin rubor algunos mensajes en alemán, ante la desesperación del equipo de redacción.

La versión V3-0, se diferencia de la anterior V2-O en una serie de prestaciones añadidas y otras eliminadas, en función de la orientación del equipo, Es decir, el Basic del FM-7 ha sido revisado para trabajar sin problemas en entornos de programación donde el manejo de gráficos y sonidos adquiere vital importancia. En este sentido, las instrucciones: SCREEN, COLOR, PLAY Y SOUND han sido introducidas en la versión V3.0, mientras que la instrucción ANPORT – para el control de interfaces con entradas analógicas – ha sido eliminada,

El F-Basic permite además trabajar al FM-7 en modo terminal, lo que es especialmente interesante para las aplicaciones didácticas y profesionales de esta máquina, que alcanzan su máxima expresión en el «aula informática» que suministra Secoinsa y de la que se hablará más adelante.

En términos generales, la potencia de este Basic es semejante a la de otros dialectos de este popular lenguaje incorporados en equipos de precio similar e, incluso, superior. La firma de Microsoft se hace patente en multitud de detalles como la versatilidad del editor o los mensajes de error. El cuadro de estos últimos incluye un total de 65 frases en el modo de Basic residente en ROM y 73 para el modo disco

Sin embargo, los entornos de programación no terminan para el FM-7 en el Basic que incorpora en la configuración base. Por el contrario, el fabricante ofrece otros lenguajes como: Logo, Pascal, Ensamblador, Basic 09, Cobol, etc.

De lo dicho se desprende que está disponible el sistema operativo OS-9, un derivado del UNIX que está dando mucho de qué hablar y que ya fue analizado en profundidad por MICROS (ver número 16, marzo de 1985). La posibilidad de trabajar en modo multiárea, utilizando el Basic 09 o los compiladores de Pascal, C, etc, son algunas de las ventajas que se presentan al usuario del FM-7 con este sistema operativo, cuyo único beneficiario español hasta el momento era el popular Dragón.

Asimismo, existe una tarjeta Z-80A que proporciona al Secoinsa FM-7 la posibilidad de trabajar bajo el sistema operativo CP/M-80, que incorpora compiladores de Basic, Pascal y Cobol, además de un procesador de textos, una hoja electrónica para entornos de gestión y una base de datos. El CP/M-80 que estuvo en poder de MICROS no estaba traducido, aunque fuentes de Secoinsa aseguraron a esta revista su disponibilidad en idioma español en breve plazo.

Por otra parte, el Logo en español que puede adquirirse para el FM-7 será objeto de un test específico, que aparecerá en las páginas de esta revista tan pronto como sea posible, Cabe adelantar, no obstante, que se trata de una versión muy potente de este conocido lenguaje educativo. Puede trabajar hasta con cuatro «tortugas» definibles por el usuario, ficheros y sonidos,

Aplicaciones educativas

Dentro de este capítulo, cabe destacar un buen número de aplicaciones desarrolladas por Secoinsa para impartir clases de Formación Profesional y BUP, todas ellas en castellano y adaptadas a las normas académicas vigentes. Además, existe una serie de periféricos que potencian las posibilidades gráficas y sonoras del FM-7, orientados precisamente hacia el área de la educación, Se trata del lápiz óptico, el ratón y el generador de sonidos. Si bien este último se encuentra incorporado en el hardware de la unidad central como parte integrante de la configuración mínima, existe una salida especial que permite la conexión de esta máquina con un amplificador hi-fi, además de un sintetizador de voz y otros periféricos de sonido en vías de desarrollo en este momento.

Del lápiz óptico es necesario destacar su potencia para la generación de gráficos. A pesar del escaso tiempo que estuvo en poder de MICROS, este periférico demostró sobradamente una calidad excepcional en la ejecución de representaciones en pantalla de la más diversa complejidad. Dispone de una paleta que supera los 250 colores, además de la posibilidad de crear el color que el usuario desee en cada momento y de tres tipos de trazo (sombra, brocha y pluma) que abren nuevas fronteras a la creación artística.

El ratón, reducido en sus posibilidades al control y desarrollo de imágenes en pantalla, es uno de los periféricos disponibles para el FM-7 que está llamado a ampliar sus posibilidades. Quizá sería interesante desarrollar un nuevo software para que pudiera comportarse como lo hacen los ratones de los Apple o, más modernamente, los nuevos modelos de Atari, aún sin presentar oficialmente en nuestro país.

Con todo, el ratón del FM-7 trabaja de un modo eficaz, más cómodo de ejecución que el lápiz óptico, ya que no es necesario mantener el brazo «en vilo» apoyando el instrumento sobre la pantalla del monitor, pero con menos posibilidades creativas, al disponer de un número muy limitado de colores y trazos,

El «Aula informatizada Secoinsa-84» es una red con arquitectura en estrella de la que es posible colgar hasta 128 FM-7, aunque el máximo pedagógico admitido no sobrepasa los 15 terminales, Según pudo observarse en el recientemente celebrado salón de material educativo Iberdidac, el nodo del profesor dispone de todos los recursos de la red (unidades de disquete, impresora, modem, etc.) y es el encargado de administrar su uso por parte de los alumnos, al tiempo que puede controlar en todo momento el trabajo de cada terminal sin interrumpir su trabajo.

Toda la documentación

Quizá el hallazgo más interesante que puede hacer un nuevo usuario del Secoinsa FM-7 al abrir la caja donde ha sido embalado, aparte de las posibilidades de la máquina, es una completa colección de manuales. Estos recogen no sólo los datos fundamentales del equipo (Manual del Sistema) y del Basic estándar, sino que en el «Manual del Usuario» se ofrece un análisis exhaustivo de las interioridades del FM-7.

Este volumen de documentación, inútil para aquellos usuarios que sólo pretendan jugar a los «marcianos» con el FM-7, responde a una filosofía de sistema «abierto» con que el fabricante ha querido dotar a esta máquina. Con semejante información es posible incluso realizar modificaciones en el hardware y software del sistema. Está por tanto reservada a usuarios con inquietudes más allá de lo convencional.

Conclusiones Micros

Se han quedado en el tintero infinidad de aspectos que por razones de tiempo y espacio no ha sido posible siquiera mencionar. Sin embargo, puede señalarse como conclusión que el FM-7 está llamado ejercer una notable influencia, sobre todo entre los usuarios más jóvenes, tanto si resulta homologado por el Ministerio de Educación, como si no.

Esto es así por la calidad, flexibilidad y posibilidades del equipo, demostradas sobradamente durante el tiempo de prueba en la redacción de MICROS. Los aspectos señalados como negativos en el texto de este artículo no suponen, en ningún caso, razón suficiente para descartar al FM-7 del futuro de la escena microinformática española. Sería deseable, eso sí, que los pequeños «defectos» mencionados fueran tomados en cuenta por el fabricante con vistas a su corrección, sobre el mismo modelo o en máquinas de lanzamiento futuro.

En resumen, el Secoinsa FM-7 es un equipo que ofrece, con un precio muy ajustado, un buen número de posibilidades educativas y profesionales, dentro de las necesidades de la escuela y el usuario independiente español.

Bernardo Rubio

Lista de Precios Secoinsa FM-7, en resumen
Unidad central 85.000 Microprocesadores 68B09 (dos Unidades)
Monitor Color 12 pulgadas 120.000
Monitor Monocromo 60.000 Memoria RAM 64 Kb (usuario) 48 Kb (video) expansión a 256 Kb disponible en breve plazo
1ª Unidad de Disquetes 80.000
2ª Unidad de Disquetes 55.000 Memoria ROM 8 Kb
Interface RS-232C 27.000
Procesador Z-80A 75.000 Teclado Profesional tipo QWERTY, keypad numérico independiente, diez teclas de función programables, caracteres españoles color o monocromo, 640x200 puntos, 20/25 x 40/80 líneas x columnas
Ratón 27.000
Lápiz Optico 35.000 Comunicaciones Interface serie RS-232, paralelo Centronics
Adaptador TV 5.000
Aula Informática 350.000 Lenguajes F-Basic, Logo, Pascal, Cobol, C, Ensamblador, Basic 09


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